Samsung amenaza con demandar a Apple inmediatamente si lanzan un iPhone con tecnología LTE

La semana pasada, Samsung fue condenada en una corte de Estados Unidos a pagar más de mil millones de dólares a Apple por haber infringido varias de las patentes de Apple en sus teléfonos inteligentes. En aquel momento nos sentimos contentos con el veredicto, pero en el fondo sabíamos que las cosas no se iban a quedar ahí, y que más demandas estaban por llegar, desde ambos lados.

Y no tuvimos que esperar demasiado para ver la primera reacción de Samsung, y ayer materializaron toda su frustración y su ira en forma de amenaza para Apple. De acuerdo con un artículo publicado hoy en el Korea Times, Samsung ha dicho que está preparando para un gran contraataque legal, y que están tomando "todas las medidas para afrontar todos los escenarios posibles y luchar contra Apple en 50 disputas de patentes en 10 países". En otras palabras, una declaración de guerra.

Pero la cosa no se queda ahí, en el mismo artículo Samsung ha confirmado que está preparado para demandar a Apple inmediatamente si el próximo iPhone cuenta con tecnología móvil LTE, y aseguran tener las patentes para hacerlo.

De cumplir su palabra, Samsung sólo está a la espera de que Apple lance el iPhone 5 para demandarlos, un movimiento que podría lesionar notablemente las ventas del nuevo iPhone de Apple. Pero aunque no tenemos ninguna duda de las intensiones de Apple, hay algunas cuestiones que Samsung debe superar para tener éxito.

En primer lugar está el hecho de que la tecnología LTE (4G) en los últimos años se ha convertido en el estándar más alto de la industria móvil global, y aunque Samsung no ha especificado cuáles son las patentes que respaldaran su demanda, cabe la posibilidad de que Samsung tenga que apegarse a las reglas de licensiamiento FRAND (fair, reasonable, and non-discriminatory terms).

FRAND es un término utilizado para referirse a las licencias con términos justos, razonables y no discriminatorios. Y su función básica es la evitar que las tecnologías que se convierten en estándares sean utilizadas de forma inadecuadas por las organizaciones propietarias de dichas patentes.

Por ejemplo, supongamos que mañana una empresa descubre una manera de cargar los teléfonos móviles de forma inalámbrica y a distancia, y que esa compañía empieza a licenciar su tecnología, y las demás empresas empiezan a implementar dicha tecnología en sus teléfonos hasta el punto de convertirla en un estándar. Pues bien, la compañía dueña de las patentes, no podrá reservarse el derecho de escoger a quien le ofrece las licencias y a quién no, ya que gracias a las licencias FRAND, está en la obligación de ofrecer el mismo trato a todo aquel que desee usar su tecnología.

Esto evita el monopolio, y garantiza el "buen uso" de las propiedades intelectuales de las empresas. Y este amigos míos, podría ser el primer obstáculo para Samsung.

Ahora bien, una cosa que debemos reconocer es que Samsung actualmente posee la mayor cartera de patentes en tecnología cuando se trata de propiedad intelectual sobre infraestructura móvil. Pero, ¿tiene Samsung las patentes necesarias para demandar a Apple e impedir la venta del iPhone 5?

Según datos de Thomson-Reuters, Nokia ocupa el primer lugar con el 18.9 por ciento en términos de cantidad de patentes LTE, seguido por Qualcomm con un 12.5 por ciento, Samsung Electronics con un 12.2 por ciento y Ericsson con un 11.6 por ciento.

Ciertamente, Samsung posee la cantidad de patentes necesarias para sacarle algo de dinero a Apple, pero en todo caso no más que los 1,051,855,000 dólares que tienen que pagarles a Apple.

El escenario no luce muy alentador, y muchos fanáticos de Samsung se están frotando las manos ante la posibilidad de que Apple tenga que pagarle una millonada a Samsung, pero me temo que Samsung tiene un plan más inteligente.

Particularmente creo que Samsung podría estar buscando un acuerdo de licencia cruzada con Apple. En otras palabras: en lugar de continuar enfrascado en una batalla legal larga y costosa con Apple y de correr el riesgo de que sus dispositivos sean prohibidos en los Estados Unidos (y potencialmente tener que pagar mucho más de lo que ya han pagado por daños de infracción dolosa), Samsung podría intentar forzar a Apple a una tregua. Esto implicaría ofrecerle licenciar las patentes de LTE a Apple, mientras que Samsung a su vez tendría que hacer lo mismo con algunas de las patentes que cubren el iPhone y el iPad.

Si estoy equivocado, entonces las cosas irán a peor, y los resultados podrían ser catastróficos para ambas empresas. Sin embargo, no podemos olvidarnos de que la raíz de todas estas demandas es el dinero, y cuando de dinero se trata, nadie tiene más que Apple. Es verdad que Samsung tiene más patentes sobre tecnología móvil que nadie, pero Nokia tiene casi la misma cantidad, y pueden estar seguros que si Apple se ve acorralada, no se lo pensarán dos veces para comprar a Nokia, RIM o cualquier otra empresa que pueda engrosar su cartera de patentes. Tal como hizo Google recientemente con la compra de Motorola Mobility.

En el peor de los casos, ambas empresas se autodestruirán y Microsoft se erigirá como el nuevo rey de la telefonía móvil mundial, aunque si nos apegamos a la lógica del dinero, Samsung está supuesto a caer primero. Pero con toda sinceridad, espero que no haya que llegar a esos extremos.

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