Apple se queda con el 75% de las ganancias de ventas de teléfonos inteligentes a nivel mundial. ¿Pero por qué?
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El famoso analista Horace Dediu de Asymco ha reunido una serie de gráficos que explican de forma bastante clara el porqué del meteórico ascenso de Apple el en mercado mundial de smartphones. El informe explica porque Apple que apenas cuenta con el 9% de los teléfonos inteligentes vendidos a nivel mundial, se que queda con el 75% de todos los beneficios generados por la industria.
Todos saben que a nivel mundial Android es la plataforma móvil dominante, sin embargo, si sumas los beneficios obtenidos por todos los fabricantes de smartphones Android, junto con los beneficios de Nokia, RIM (BlackBerry) y demás fabricantes, en total todos juntos obtienen apenas un tercio de las ganancias que obtiene Apple.
Estas cifras no son para nada sorprendentes, ya que lo mismo ocurre con las computadoras. Apple apenas vende poco más del 5% de los ordenadores que se venden en todo el mundo, sin embargo, gana más que HP y Lenovo, que tienen un 30% del mercado combinados.
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Cualquiera podría pensar que el precio de los productos tiene algo que ver con el hecho de que Apple gane más que otros fabricantes como Samsung o HTC, pero la realidad es muy distinta. En realidad, en los últimos años el iPhone se ha vendido al mismo precio que los móviles de la competencia. De hecho, muchos de los móviles de Samsung y Motorola se venden más caros que el iPhone. El mejor ejemplo es el Google Nexus y el iPhone 4S. El Nexus es más caro que el iPhone 4S de 64GB, y puedes confirmarlo tú mismo con tu operadora de telefonía móvil favorita.
Las razones por las que Apple gana más que los demás fabricantes aun cuando vende menos teléfonos inteligentes son variadas, y a continuación se detallan algunas.
- Costo de fabricación más bajo. A Apple le sale más barato fabricar un iPhone que a la competencia fabricar un teléfono similar, y eso se debe a que Apple es el principal consumidor de partes para dispositivos electrónicos, desde las pantallas hasta dispositivos más simples como diodos y resistencias. Eso le permite firmar acuerdos con sus suplidores que hacen que el costo por unidad sea bastante ínfimo.
- Apple no persigue a la competencia. Si se fijan, Apple no se deja llevar por los impulsos a la hora de decidir que tendrá o que no tendrá el iPhone. Todos los fabricantes de teléfonos Android se enorgullecen de tener pantallas enormes, de hasta 4.5 pulgadas, pero 1 un incremento de 0.5 pulgadas representa un aumento en el costo de cada pantalla. Lo mismo ocurre con la memoria RAM, mientras que muchos teléfonos ya vienen con 1GB de RAM, el iPhone 4S se las arregla muy bien con 512MB. Es la mitad de memoria RAM y menos de la mitad del precio por cada unidad de memoria. El hecho de que Apple no tenga que perseguir a sus competidores, le da la ventaja de ir a sus aguas y les permite explorar todas las opciones antes de decantarse por una.
- Todos los iPhones se venden bien. Hay que tener en cuenta que si bien el iPhone 4S se vende muy bien, el teléfono salió al mercado en Octubre, de modo que es imposible que tales márgenes de ganancia provengan sólo del iPhone 4S. La realidad es que el iPhone 4 y el iPhone 4S se siguen vendiendo como pan caliente gracias a sus precios rebajados.
El hecho de que Apple rebaje el precio de sus iPhones con la salida de cada nuevo modelo, les ayuda a mantener cubierto todo el espectro de venta, ya que quien no pueda comprar un iPhone 4S podrá comprarse el iPhone 4 o el iPhone 3GS por un menor precio, y aun así tener un iPhone. La competencia simplemente saca teléfonos para competir con el iPhone, pero cuando sale un nuevo modelo, el modelo anterior queda en la obsolescencia casi automáticamente.
- Apple no envía, vende. La última razón y no por ello menos importante es la forma en que Apple vende sus teléfonos a las compañías de teléfono. Por ejemplo, el iPhone 4S de 16GB le cuesta a Apple 196 dólares fabricarlo. Pero cuando una compañía de teléfonos (Verizon, AT&T, Orange, T-Mobile, Vodafone, Sprint, O2, China Telecom, etc.) quiere vender el iPhone 4S, le paga a Apple el valor del costo de fabricación del teléfono en el preciso instante en el que lo reciben. El resto se lo pagan cuando la operadora de telefonía móvil le vende el teléfono a un usuario con un contrato. De esta manera, se venda o no el iPhone, Apple ya se ha asegurado el precio de fabricación del teléfono, de modo que no tienen perdidas aun si no se vende ningún teléfono.
De este modo, las operadoras de telefonía móvil son "las más sacrificadas", ya que pagan de antemano por un teléfono que no saben si venderán o no, aunque para ser sinceros, dichas compañías no son para nada ingenuas, y hacen tal inversión porque saben que recuperarán su inversión, y que obtendrán ganancias en el preciso instante en el que los usuarios firmen un contrato de 18 ó 24 meses para adquirir el teléfono.
Los demás fabricantes no venden de la misma manera. Lo que hacen es enviarle los teléfonos a las compañías de teléfonos y cuando se venden entonces reciben el pago. Si la compañía no vende los teléfonos, simplemente se los devuelve al fabricante. De ahí la importancia de saber diferenciar entre vender y enviar; sólo las ventas generan ganancias.
Finalmente, Puede parecer Apple llegó a la cúspide y que ya no tienen dónde ir más que hacia abajo, pero eso tampoco es cierto. Con más y más operadores internacionales todavía en proceso de agregar el iPhone 4S a sus alineaciones, queda claro que Apple le queda aun mucha altura por conquistar, y sospechamos que sus ingresos y su cuota de mercado seguirán subiendo en los próximos meses y años.
