Apple planea lanzar un iPhone plegable
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Hace ya unos años apareció en escena el material conocido como grafeno.
Este material prometía ser poco menos que milagroso, permitiendo la fabricación de todo tipo de dispositivos que hasta el momento solo se habían visto en la ciencia ficción, entre ellos, gadgets similares a smartphones que era tan flexibles como una hoja de papel y que se podían doblar para ocupar un tercio de su tamaño e incluso que podríamos colocar en nuestra muñeca a modo de reloj.
En realidad, seguían siendo cosa de ciencia ficción, puesto que el grafeno aún tardaría décadas en convertirse en lo que esos videos nos mostraban, pero la industria ya estaba buscando soluciones a este tipo de problemas antes de que surgiera ese boom por el grafeno.
Lo cierto es que los dispositivos flexibles llevan formando parte del imaginario colectivo desde hace décadas. Desde periódicos que funcionan como pantallas y pueden mostrar video, hasta dispositivos que se pliegan hasta convertirse en poco menos que un botón.
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La realidad, sin embargo, es que aún estamos lejos de ese tipo de tecnología flexible, pero no tanto como podríamos creer.
Hace ya diez años comenzamos a ver smartphones con pantallas que, sin poder doblarse, sí que estaban curvadas para permitir ver notificaciones sin necesidad de abrir la cobertura que protegía la parte frontal del dispositivo.
También vimos la aparición de televisores curvados que, en el caso de aquellos con un número de pulgadas mayor, generaban el efecto de un cine IMAX. Algo sin duda espectacular.
Pero todos estos ejemplos no dejaban de ser dispositivos con pantallas fijas que, pese a tener superficies curvadas en lugar de rectas como en todos los dispositivos tradicionales, no eran en absoluto flexibles.
De hecho, en el caso de los grandes televisores, la forma de estos los hacía ocupar mucho espacio a pesar de ser pantallas planas, lo que sumado a que se trataba de algunos de los televisores más grandes, es decir, con más pulgadas del mercado, los convertía en aparatos que ocupaban medio salón y, salvo que tuvieras mucho espacio disponible, el efecto de la pantalla curvada podía no merecer la pena.
Especialmente teniendo en cuenta que su precio era significativamente superior al de los televisores normales.
Más recientemente hemos visto cómo múltiples empresas comenzaban a anunciar dispositivos con verdaderas pantallas plegables, y Apple por supuesto es una de ellas.
Estos dispositivos poseen pantallas que una vez desplegadas, muestran la imagen sin ningún tipo de división a lo largo del eje por el que se doblan.
Es decir, que no estamos ante dos pantallas separadas, sino que una vez desdoblada se muestra como se mostraría una pantalla de ese tamaño.
Estos dispositivos no son baratos, pero esta impresionante tecnología ya está causando furor entre los usuarios.
Y es comprensible que el público esté emocionado ante la posibilidad de tener en sus manos un pequeño dispositivo que poner en el bolsillo del tamaño de un smartphone ordinario, que pueda desdoblarse para convertirse en una tableta, con una pantalla el doble de grande donde poder ver películas o trabajar de forma mucho más cómoda.
Son varias las empresas que se han lanzado a la producción de este tipo de gadget para evitar quedarse atrás frente a sus competidores. Es el caso de Huawei o Motorola, que ya tienen sus productos en el mercado el pasado año 2020.
Muchos se preguntaban cuándo se uniría el titán Apple a la fiesta de los dispositivos plegables. Ya han anunciado el iPhone Fold y el iPhone Flip.
Siguiendo la idea del Huawei Mate Xs, el iPhone Fold mantendrá una pantalla aproximadamente igual que la de los iPhones actualmente en el mercado, pero con la capacidad de desdoblarse para formar una pantalla el doble de grande y ocupar la mitad cuando no está siendo usado.
Esto modificará el diseño clásico del iPhone, pero lo que es seguro que no va a cambiar es la diversión del usuario con el dispositivo. El software seguirá siendo igual de potente, lo que permitirá a los más jugadores disfrutar.
Aquellos que sean amantes de los juegos de azar lo tendrán fácil, pues podrán jugar como en un casino físico desde cualquier lugar debido a la adaptación móvil de estos.
Sin duda, la tecnología seguirá mejorando y poco a poco este tipo de dispositivos se irán haciendo más accesibles.
Pronto, la mayoría de las personas podrán poseer algo que no hace tanto solo era posible en el cine.
